jueves, 25 de julio de 2013

Mi Conclusión Final.

Ha llegado el momento de escribir mi última entrada, no sé que sentir ni qué escribir. ¿Cómo finalizar un proceso cuando lo único que hacíamos durante este era vivirlo, sin darnos cuenta de que el tiempo avanza y no deja nada detrás de sí excepto recuerdos en nuestros corazones?
Sin embargo, debo hacerlo, parte de los procesos de la vida consisten en cerrar etapas. Estas etapas, querámoslo o no, nos forman como un nuevo ser, un nuevo pensamiento, una nueva realidad. Entonces, puedo decir con certeza que no soy el mismo muchacho ahora de lo que era en marzo.

Hoy, 25 de Julio, me doy cuenta que tomo en cuenta más cosas a la hora de hablar, pienso en las palabras que definen a la perfección las cosas y busco formas novedosas de transformar mi alrededor.  Porque, ¿cómo pretendemos querer cambiar la realidad si antes yo no era ni capaz de pensar en que puedo crear lo que yo desee? Hoy lo sé, hoy sé que puedo funcionar y formar nuevas cosas a partir de lo antiguo. Puedo combinar los objetos y transformarlos en una obra de arte porque ese es el secreto de la victoria evolutiva del ser humano: Usar la razóna través de la creación. 

Creatividad incluye la creación, nos enriquece porque sentimos que dejamos algo en este mundo. De igual manera en que un músico o un artista dejan plasmado su paso por esta vida, nosotros podemos dejar plasmado nuestro recuerdo en simples regalos creativos a nuestros compañeros, por ejemplo.

Entonces creatividad es todo, no pretendo saberlo todo ahora y sé que jamás lo lograré pero puedo intentar crear todo y sé que en mi mente lo puedo lograr. Esta mente ahora está abierta gracias a este ramo, esta mente empieza a absorber las complicaciones de la vida e intenta buscar solución de forma óptima.

Creo que todos mis compañeros se han enriquecido de forma cósmica con esas clases que vivimos sin saber los jueves en la tarde, después de almuerzo. Solo espero que los recuerdos vivan en nosotros por el resto de la vida y, quizás cuando tengamos cuarenta o cincuenta años, recordemos nuestro primer año de universidad tocando instrumentos en Brígida Flores o escribiendo nuestras virtudes en un triángulo; o darnos la mano mirándonos a los ojos como también abriendo nuestros más preciados secretos a un grupo curso.



Quiero ocupar estas últimas líneas para agradecer a los dos profesores: Erna Navarrete y Félix Herrera por haber puesto de su parte para crear una atmósfera cómoda y bonita para que todos aprendamos lo hermoso que es crear y compartir con los demás.

Entonces cierro esta etapa a partir de estas últimas 500 palabras que estoy finalizando, saludos a todo el que leyó esto aunque sospecho que fue solo el profesor. Espero haber sido lo suficientemente bueno escribiendo y espero que en un futuro pueda usar nuevamente esta plataforma para expresar mis sentimientos y gratitudes por la vida universitaria que he estado llevando a cabo.


Adiós mi blog. 

Entrega de Regalos.

La profesora nos había ordenado hacer una buena cantidad de semanas que nos organizáramos en grupos de siete personas aproximadamente. Todos estuvimos expectantes, después de todo un semestre nunca sabemos que esperar de las llamativas clases de estrategias de la intervención. Entonces se nos mandó la actividad de pensar una palabra que hubiésemos visto en los otros ramos que tuvimos este semestre, nosotros elegimos la palabra “orquestación”, vista en el ramo: Introducción a la Terapia Ocupacional con la profesora SilviaGómez.

La idea era realizar un regalo para cada integrante del grupo que tuviese relación con la palabra, al principio fue difícil pensar en algo que fuera útil y a la vez bonito que entregar a nuestros compañeros. Yo no soy muy bueno haciendo estas cosas, es por la razón que elegí “música” cuándo fui promovido a primero medio, entonces no había hecho este tipo de construcción creativa desde la enseñanza básica.



Realicé horarios para un par de compañeros, con papeles pequeños de colores, con el fin de hacerlo más llamativo. También para mi compañera Claudia pude crear un “teclado de las metas”, consistía en un teclado hecho de cartulina en el que debía escribir sus metas a cumplir y poder organizarse de acuerdo a sus metas. También hice un par de formas creativas en otros regalos.

Llegó la hora entonces de juntarnos a intercambiar los regalos con el respectivo grupo. Jueves 25 de Julio del 2013, en el hall de la biblioteca de la universidad, nos juntamos todos los integrantes a intercambiar nuestros  regalos creativos.

Recibí un lindo lápiz con un muñeco que me representaba de parte de una compañera, muy lindo gesto y agradecí mucho el tiempo empleado en hacer algo así.
De otra compañera recibí unos audífonos pequeños, que representaban la pasión en mí que vendría siendo la música y los estudios.
De Valentina recibí una tabla donde deberíamos ordenar nuestras prioridades y poder estructurar una rutina ocupacional completa y que de verdad nos llene como personas.
Los demás regalos fueron también muy lindos y agradecí a tiempo a mis compañeros con un gran abrazo.



Esto demuestra que las cosas fueron hechas con dedicación y siempre sacando lo mejor de cada uno. Fue un lindo momento el que vivimos ahí en la universidad, algunos pudieron relajar su salida del examen de biología que habían tenido momentos antes, otros pudimos salir de la casa y dar una vuelta por las calles de Santiago con un día hermoso y resplandeciente de un sol primaveral que espero ver luego.

Nuevamente me quedo sin palabras, sería súper lindo si todos los grupos logren la unión que pudimos armar nosotros. No fuimos un grupo en el que estábamos con todos los que nos juntamos regularmente en la u, esto fue bueno, nos ayudó a generar lazos que no teníamos y sentirnos más cómodos con personas con las que no frecuentamos mucho en la escuela.

Esta es mi última entrada antes de la conclusión final, no puedo evitar tener sentimientos encontrados.


Nos estamos leyendo.

Mi turno de Drama

Hoy, luego de tres semanas un tanto complicadas con la problemática nacional de la educación, volvemos a vernos con nuestros compañeros preparados para una nueva clase de Drama. Eso sí, esta clase es especial para mi en lo personal porque es mi turno de presentar a una persona que signifique mucho para mí. Debíamos llevar cada uno la foto impresa y foto digital para proyectarla en clases y hablar sobre el por qué esa persona significa tanto para cada individuo del último grupo en presentación de este semestre que esta finalizando.

Entonces, escogí a mi madre: Norma Carreño. Ella es una mujer intachable, inteligente y absolutamente amorosa con y para sus hijos. Ella vive por mí y por mi hermano, siempre interesada de nuestro acontecer en la universidad o antes en el colegio. La mejor en Química y la mejor cuando se trata de “regalonear” a tus hijos.
Pero me gustaría también hacerle un espacio a mi padre: Isaac Morales. No lo elegí, pero eso no significa que no sienta un cariño intenso hacia él. Gracias a ese hombre yo estoy vivo y gracias a ese hombre pude tener una niñez llena de momentos hermosos viviendo en una fantasía total en los mundos que le gustaba inventar conmigo y con mi hermano.

Estaba algo nervioso, algunas compañeras lloraban al hablar sobre sus seres queridos y, de hecho pensé, que me tocaba lo mismo por todo el tema de la nostalgia y catarsis que produce el hablar de mi mamá y que todos me escuchen con respeto.

Para mi sorpresa, no fue así.

Cuando vi proyectada la imagen de la mujer que me concibió no pude nada más que sentir alegría, ella sale riendo en la foto y muy despeinada. Me produjo risa, como la risa que ella tiene siempre en su rostro a pesar de estar mal, solo para no preocupar a sus hijos.
Ella sabe que haría lo que fuera por su bienestar, y si ella sufre yo sufro con ella. Si ella camina yo camino.

No sé que más escribir, fue un hermoso momento. Siento que mis compañeros cada vez me conocen más y que yo los conozco a ellos, recuerdo el relato de cada uno y me convenzo cada vez más de que una persona es un mundo completo, una realidad por sí sola que vive rozando tangentemente las realidades de los individuos que lo rodean, intentando entenderlos y decodificar cada pieza que construye al otro.

He aprendido a agarrar cariño a todos mis compañeros, independiente de la forma en que me miran o las pocas palabras que hemos intercambiado. Estoy seguro que somos cómplices porque nos conocemos a profundidades estratosféricas, así nos comprendemos de verdad y somos capaces de aceptar la historia y verdad de las personas.


 Me siento muy complacido por todo lo que mis compañeros han producido en mi vida durante estos meses que llevamos en la facultad, son estos momentos en los que anhelo que jamás terminemos de conocernos y querernos como hoy.